Aprender un segundo idioma dará a tu hijo muchas más ventajas de las que piensas, pues no sólo influirá en su vida profesional, sino que lo ayudará a generar más confianza en sí mismo y estimulará el hemisferio izquierdo del cerebro, donde se desarrolla el lenguaje y el pensamiento lógico.
Aprender inglés desde muy temprana edad es la mejor manera de garantizar que tus hijos se familiaricen con la lengua y puedan desarrollar un dominio completo de la misma. Sin embargo, como padres nos llenamos de inquietudes al inscribir a nuestro hijo en un colegio bilingüe o a clases de inglés particulares:
¿Qué pasa si yo mismo no soy bilingüe, ni sé hablar inglés? ¿Cómo puedo ayudar a mi hijo a aprender el idioma? ¿Qué tal si, en lugar de ayudarlo, lo confundo?